Cuando llegamos el apartamento estaba realmente sucio, pelusas por el suelo, manchas en paredes y sábanas… La ventana estaba rota y la habían tapado con cinta aislante, por lo que entraba frío.
Lo peor de la estancia fue que no tuvimos agua caliente, se lo dijimos a la propietaria y ella solo decía que si que había y no nos solucionaba el problema. Finalmente, dejamos el apartamento días antes porque era imposible estar asi.
Una noche estábamos durmiendo y la propietaria entró sin autorización, despertándonos, lo que nos dio muy poca seguridad.
El barrio no es muy agradable y por la noche es mejor no andar por el. Para llegar a Manhattan hay que coger un bus que tarda 1h, que cuesta 6$ cada viaje sin posibilidad de un abono que lo haga más economico.
Si quieres disfrutar de tu viaje a Nueva York no reserves en este apartamento.